15/05/2018
Tal y como se ha podido comprobar a lo largo de los diversos artículos que se han publicado por parte de este despacho de eSports, el mayor problema al que se expone este fascinante mundo de los deportes electrónicos, y por ende los abogados de eSports que asesoramos al sector, es la falta de regulación específica, lo que sitúa en una difícil posición tanto a los clubes como a los jugadores.
Los eSports son un sector de actividad que ha ido creciendo año tras año y cuyas proyecciones se disparan en el tiempo. Los eSports están llamados a ser uno de los mayores sectores de actividad de la próxima década y es ahora cuando hay que realizar un esfuerzo jurídico-legislativo para evitar problemas en un futuro.
La falta de regulación específica obliga a utilizar las herramientas que el derecho general pone a nuestra disposición, pero estas herramientas no siempre dan solución a las necesidades o problemas, ni de los clubes ni de los jugadores, a los que hay que enfrentarse. Volviendo sobre un artículo anterior, ¿si un menor de edad alcanza un nivel adecuado para jugar una competición oficial debe quedarse sin jugar porque no se le puede contratar? ¿debe el club exponerse a una sanción por parte de la autoridad laboral por tener a un menor de edad jugando? ¿las horas que un menor puede jugar deben ser conforme al Estatuto de los Trabajadores? ¿y si debe abandonar una partida a la mitad, debido a un exceso de horas, se penaliza al equipo?
Estas son algunas de las dudas que los clubes y los jugadores plantean a los abogados de eSports y son las que deben ser estudiadas y consideradas. El problema es que la legislación española aún no se ha molestado en regular este sector de actividad por lo que, en cuanto a los eSports, se está desprotegiendo a los clubes y a los jugadores que no encuentran en la norma soluciones válidas para sus problemas.
En este sentido, y ante la falta de legislación específica, hay quien aboga por realizar acuerdos privados, a modo de autorregulación dentro del sector de eSports, en los cuales se establezcan una serie de pautas y acuerdos mínimos, con el fin de preservar los intereses de cada parte. El problema de esta autorregulación son los eventuales abusos que pueden surgir en cualquier sentido, y desde luego la eficacia jurídica que ante una eventual controversia pueden tener dichos pactos. Ésta puede ser una solución a corto plazo, pero a la larga lo único que puede generar es problemas cuando surja la inevitable fricción entre los intereses de cada parte o entre los diferentes equipos, o incluso con la liga.
Por eso, Francia se ha puesto a la cabeza en la Unión Europea y ya ha regulado de manera específica los eSports, tal y como veíamos en un artículo anterior, dotando a los jugadores de eSports de un carácter específico y así dando solución a los diversos problemas a los cuales se han enfrentado los clubes y los jugadores, incluido el uso de menores. En Corea del Sur, país pionero de los eSports también se aprobó el Act On Promotion of eSports donde se comprometieron a desarrollar la normativa necesaria para este sector de actividad.
En nuestro país, este sector crece año tras año, durante el año 2017 los eSports tuvieron una media de 17,4 millones de espectadores acumulados lo que supuso un crecimiento del 44,7% respecto al año 2016, y que generó 42 millones de reproducciones y un total de 770 millones de minutos vistos (todo según datos de la Liga de Videojuegos Profesional). Esto quiere decir que en España existe una clara atracción por los eSports. Dejar a la autorregulación un sector de actividad que mueve estas cifras, supone exponer a un riesgo tanto a los jugadores como a los clubes por lo que urge una regulación en este sentido. La opinión de este abogado es que por parte de la autoridad laboral debe hacerse un esfuerzo para regular los eSports, y si puede ser y ya desde una perspectiva laboral, creando para los jugadores una figura especial que tenga su encaje en el artículo 2 del Estatuto de los Trabajadores pues ello establecería unas condiciones de derecho mínimo necesario que permitirían a los clubes conocer si están cumpliendo o no con la legalidad vigente.
Lo cierto, es que el grupo parlamentario Ciudadanos presentó una propuesta no de ley en el Congreso de los Diputados el pasado 16 de enero, con el fin de dar un avance normativa a este sector de actividad y es que es absolutamente necesario crear un marco normativo en el cual los jugadores y los clubes, a través de la negociación puedan encontrarse cómodos y gozar de seguridad jurídica, pues solo desde la regulación y la negociación puede darse el impulso que los eSports necesitan para convertirse en el gran sector que están llamados a ser.