Aunque el Estatuto de los Trabajadores tan solo dice que habrá de determinarse cómo «se organizará y documentará» el registro de jornada, nada dice sobre la obligación de regular internamente esta cuestión.
Sin embargo, un Protocolo o una Política Interna en esta materia se presenta como algo esencial e imprescindible en toda empresa.
¿Cuáles son los beneficios de un Protocolo o Política Interna?
- Prevención: Es la herramienta más efectiva para evitar futuros problemas. Ayudará a evitar sanciones de la Inspección de Trabajo, y ofrecerá una prueba útil frente a posibles reclamaciones de trabajadores en cuestiones relativas a la jornada.
- Seguridad: Ofrece seguridad tanto a trabajadores como a empresarios, al establecer de manera clara cuáles son las normas que se han de seguir para cumplir con esta obligación legal.
- Personalización: El contenido se puede adaptar no solo al funcionamiento general de cada empresa, sino también a las casuísticas concretas que pueden existir para cada colectivo de trabajadores.
- Control: Permite a la empresa tanto conocer con exactitud el tiempo de trabajo que llevan a cabo sus empleados, como las causas o motivos -y su frecuencia- que impiden hacer una jornada íntegra de trabajo o el cumplimiento del horario establecido.
- Concienciación: Los trabajadores tienen más conciencia del trabajo efectivamente realizado.
- Productividad: El mayor aprovechamiento de la jornada para evitar demasiados tiempos no productivos que pueden implicar retrasar la hora de la salida, supone un incremento de la productividad.
- Conciliación: Una mayor concienciación del trabajo, así como de la necesidad de aprovechar de forma más productiva la jornada, permite ajustar mejor las tareas y gestionar el trabajo de manera más efectiva, lo que consigue mejorar la conciliación laboral y familiar.
- Gestión de RRHH: La posibilidad de controlar de forma más efectiva la jornada de la plantilla ayuda a observar más fácilmente posibles descompensaciones en las cargas de trabajo de los empleados.
- Exigibilidad: Establecer normas y delimitar las consecuencias de su incumplimiento es esencial para poder adoptar medidas frente a aquel que, con su forma de actuar, puede generar un riesgo a la compañía.
En EJASO ETL GLOBAL ayudamos a las empresas a implementar un Protocolo o Normativa Interna de Registro de Jornada personalizada y adaptada a las concretas circunstancias de cada compañía.