08/05/2018
El pasado 3 de mayo el Ministro de Justicia, Rafael Catalá, se reunió con un grupo de veinticinco abogados sevillanos, a fin de pulsar, de primera mano, sus inquietudes sobre el funcionamiento diario del sistema judicial, y recabar sus propuestas de mejora que permitan un mejor y más provechoso desarrollo de la profesión tanto para los Letrados como para los ciudadanos, en general.
El formato distó mucho de ser tradicional; consistió en una comida-cocktail, en la que el Ministro comenzó con unas breves palabras sobre los nuevos hitos a afrontar por la Justicia en los próximos años, y tras unas obligadas referencias a la actualidad, dedicó unos minutos a conversar con todos y cada uno de los asistentes a fin de conocer mejor las áreas de mejora que, a título personal, cada uno puso de manifiesto.
Al evento asistieron profesionales de todas las grandes firmas y reconocidos Letrados de Sevilla, así como Abogados de importantes empresas con sede en esta Capital. Nuestra firma estuvo representada por Elena Ollero Rosety, quien departió brevemente con el Ministro, trasladando las preocupaciones que, día a día, se observan en el Despacho:
El Sr. Catalá mostró interés y tomó notas de cada una de estas cuestiones, particularmente las relativas a los nuevos sistemas de comunicación y notificación y su funcionamiento, solicitando y requiriendo más información sobre cada una de ellas, y exponiendo algunas iniciativas que pudieran ser de nuestro interés al respecto.
Finalmente, el Ministro comentó los nuevos retos legislativos que se plantean, en relación con la reforma profunda de nuestro Código Penal, Ley de Enjuiciamiento Criminal para abordar el nuevo esquema del procedimiento penal y la nueva condición de la Fiscalía como responsable de la investigación, y la consiguiente necesidad de reforma de su Estatuto, el nuevo Código de Comercio y otras particularidades.
La jornada se enriqueció, aún más si cabe, con la convivencia entre los compañeros asistentes y la posibilidad, que no siempre nos permite nuestro trabajo, de departir e intercambiar opiniones sobre el desarrollo de nuestro profesión.